Soria también existe. Este lunes andaré por ahí para leer uno de mis cuentitos y de paso recoger el segundo premio del Certamen Literario "Soria saludable". Estos no son vientos racheados, esto es estar en racha.

Aquí me veis, tan fotogénico como siempre, en El Escorial, recibiendo el diploma de ganador del XXV Certamen de Narrativa "María Fuentetaja", concedido por la concejalía de Igualdad. A mi lado el barcelonés Ricard Desola Mediavilla, ganador en la modalidad de Poesía. Paliza de millas náuticas (no paró de llover todo el día y toda la noche) que me di. Pero mereció la pena. Vaya que sí.

 

Será que donde pongo la pluma pongo la bala. Me han premiado con el primer premio de relato en el XXV Concurso de Narrativa Villa de El Escorial "María Fuentetaja". Así que la semana que viene me daré una vuelta (en velero, por supuesto) por El Escorial.

Un honor haber participado con un relato en este libro de escritores del Bidasoa. Relatos de todo tipo, ambientados en la comarca, pero no en la comarca de Bilbo Bolson, sino en la comarca del Txingudi, que más mágica todavía ¡¡¡Ya a la venta en la librería Oskarbi de Irún!!!

Los amigos están para compartir con ellos nuestras penas... y nuestras alegrías. No está nada mal un segundo premio en el Certamen Literario Federación de Centros de Castilla y León en el País Vasco, con un cuento de misterio, que habla de la posibilidad de que en un entorno natural se produzca una contaminación de especies (no animales ni vegetales), sino de seres mitológicos.
¡Ole!

Señoras y señores de la NASA; ¿Para cuándo un poeta en la luna?

"Mientras tenga preguntas y no tenga respuesta continuaré escribiendo." (La hora de la estrella) / Clarice Lispector

Gracias a un amigo he encontrado este video que yo tenía olvidado y que realizó mi también camarada Félix Martín, con su productora crackvideoandfilms, en el año catapún. La canción está cortada, pero las imágenes cuentan lo que falta de la letra. Otra vez al youtube. https://youtu.be/0g1VyEUcGpw

Cuando un náufrago en una isla desierta se lleva una caracola al oído ¿escuchará el ruido de la ciudad?

¡Mira qué casualidad, PRECIOSAMENTE ahora estaba pensando en ti!

Aquí Jeremiah, aferrado al timón-guitarra, capeando el temporal.

Mi querida tripulación. Jeremiah ha vuelto. Más de 15 años después, el pasado sábado me colgué la guitarra junto con unos músicos amigos (Junkal al teclado, Txemari a la percusión y mi hermana Begoña haciendo coros) y estuvo dando un recital en el Gaztetxe de Irún, LaKaxita.
Cuándo queráis subir a mi velero de música y poesía y dar la vuelta al mundo me llamáis y quedamos; bibliotecas, casas de cultura, casas okupadas, cafés-teatro, stadios...
Se acabó la calma chicha. Y navegar, navegar...

Aquí estoy otra vez, a la orilla de este mar, recién bienvenido del pueblo zaragozano de El Burgo de Ebro, donde fui agasajado con otro premio literario, en esta ocasión con un cuentecito gótico "Los Ángeles de Ortigueira". Tengo que agradecer lo bien que nos trataron las personas organizadoras a todos los ganadores. Gracias. Un beso y abrazo.

Os presento (al fin) este viodeoclip con la canción "Dulce Compañía", de mi último disco "Me llaman Jeremiah, Rey de los Vagamundos", a modo de homenaje al escritor Eduardo Galeano. El video es una producción del propio Jeremiah con Flautistas Sin Fronteras.

Me han dicho los amigos que cuantas más personas cliquen para ver el vídeo más famoso e importante seré. No sé yo...
De todas formas aquí tenéis el enlace:

https://www.youtube.com/watch?v=R5P72BoNH5c

En mitad del crudo (con esto del cambio climático más que crudo yo diría que poco hecho) aquí va un breve microrrelato. Que viva Zapata y los libros de papel!!

En lo peor de invierno

Qué escalofrío me dio cuando en lo peor del invierno, al pasar frente a la nueva tienda de telefonía de mi barrio me quedé pasmado mirando todos aquellos teléfonos móviles... tan gélidos, tan fúnebres... expuestos como ataúdes diminutos... albergando en su interior una horda de vampiros que desde el escaparate aguardaban la ocasión para saltar al cuello de los humanos y así contagiarnos su tristeza y su frío. Menos mal que unos pasos más adelante me pude refugiar en la vieja librería de Marisol, con sus mil y un sueños de papel que con solo acariciarlos me procuraron luz y calor... en lo peor del invierno.

Para empezar sano sano este año 2.016, aquí va este microrrelato de temática erótico-vegetativa, que hace poco quedó finalista en algún concurso...
FRUTA PROHIBIDA
Fruta, fruta... el olor a fruta por todas partes... Y ella, mi Eva, al otro lado de la báscula y de la caja registradora, con sus manos mariposas volando de plátano a fresa, de papaya a ciruela... Fruta, fruta... Su melena negra, como una tormenta de moras, agitada por el aire acondicionado. Sus pechos sabrosos, pequeños como manzanas. Sus pezones piñones marcados en la camiseta. Fruta, fruta... Esos ojos dulces y negros de uva moscatel, un poco silvestres, aún brillantes de rocío. La piel de melocotón tan bronceada y suave. Las piernas fibrosas sin medias, ligeramente abiertas sobre la silla. Fruta, fruta... Y sus labios de hembra madura... Pulpa, pulpa... labios jugosos, naturales, sonrosados sin pintar, que de pronto se despegan despacio, muy despacio, y dibujan una promesa mientras se acercan a mí... Tan cerca, tan cerca que yo entonces, por primer vez, puedo oler el perfume del paraíso, y empiezo a salivar... Fruta, fruta... Y cuando sus labios ya están a solo un palmo de mi cara se abren más aún... al máximo, así... y del interior de su boca surge el grito: "!!Espabila chaval, que hay más gente en la cola¡¡"